Nuestro Método para Limpiar tus Alfombras en Casa

Descubre cómo conservar el encanto de tus alfombras siguiendo un método eficaz y económico.

Las alfombras son la superficie suave sobre la que hemos vivido momentos especiales; sobre la que hemos jugado, comido y bebido. Pero nuestras preciadas alfombras pueden ser difíciles de mantener limpias y puede resultar costoso enviarlas siempre a servicios profesionales. ¿Qué puedes hacer entonces para conservarlas en mejor estado? 

A continuación te presentamos un método práctico, paso a paso, para que tu alfombra esté libre de manchas y malos olores, el cual puedes seguir incluso si no tienes máquinas especiales.

  1. Comienza con una aspirado profundo

Para una limpieza eficaz, comienza aspirando la alfombra con una aspiradora potente. Ajusta la altura de la aspiradora  (dependiendo del modelo se puede o no ajustar) según el tipo de alfombra para garantizar máxima succión. Si no tienes aspiradora, hay otras formas de limpiar la alfombra, como con una escoba de cerdas duras o un rastrillo para alfombras. Presta especial atención a las áreas de tráfico pesado y utiliza un limpiacristales o “squeegee” con borde de goma para recoger el pelo de mascotas.

  1. Limpieza de manchas

Trata las manchas tan pronto como sea posible utilizando una tapita de Quitamanchas a un bote de spray lleno de agua tibia. Para derrames líquidos, absorbe el exceso de humedad con un paño y luego aplica el quitamanchas. Para manchas más sólidas, utiliza el borde de un cuchillo sin filo para levantar los residuos antes de aplicar el quitamanchas.

  1. Aplica una solución de bicarbonato de sodio y sal para eliminar olores (opcional)

Prepara una mezcla de bicarbonato de sodio y sal en una proporción de uno a uno; la sal puede ser sal de mesa o sal gruesa. 

Espolvorea generosamente la alfombra con la mezcla. Puede resultarte más fácil trabajar en un patrón de cuadrícula comenzando en un rincón y avanzando hacia una salida. Esta solución ayudará a eliminar los olores y a refrescar la alfombra.

  1. Utiliza vapor para una limpieza profunda

Si tienes un vaporizador de ropa o un trapeador a vapor, utilízalo para humedecer la mezcla, si no tienes uno, puedes utilizar un bote de spray para rociar la mezcla con agua. Poco a poco, aplica el vapor o utiliza el spray sobre la alfombra y restriega la solución de bicarbonato de sodio y sal en las fibras con un cepillo suave. Luego, utiliza toallas o paños de microfibra para absorber la suciedad aflojada.

 

Lavar tu alfombra en casa no solo te ahorrará dinero en servicios profesionales, sino que también te permitirá mantener tu hogar limpio y fresco en todo momento.
¡Para disfrutar de una alfombra libre de manchas y malos olores!
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